18 de mayo de 2009

Adiós a Benedetti



La muerte es un ardid, un boom publicitario
para cualquier poeta, Benedetti bendito.
Tu editor, previsor, ya estará celebrando.
Tú mismo a estas alturas estarás hinchadísimo.

La poesía llana fue tu última frontera,
montañas y laderas (¿caderas?) de lectores
te llorarán ahora con lágrimas severas.
Las musas amorosas vuelven a sus labores.

Yo no te lloro, es cierto. No hay tristezas gremiales.
Confieso con candor que apenas te he leído.
Los nuestros han sido sólo encuentros casuales.
Un poco por tu culpa y mucho por tus libros.

Adiós, poeta, en breve. Ignoro tu tamaño
(si Borges fue un poeta menor, estamos fritos),
ya sabes que la muerte no era solo un amago,
la paz sea con todos, casi por compromiso.

Foto: Mario Benedetti (EFE)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo siempre he pensado que el acto de escribir poesía demuestra, al menos, una fe y un desprendimiento (cuando no una necesidad vital) que merece respeto. Benedetti no es un poeta que frecuento, pero hay en el esa rara complicidad con lo emotivo de muchas veces le permite mantenerse del lado de acá de la línea que delimita el territorio del arte y lo que se podría llamar literatura de consumo. EPD

Anónimo dijo...

Pues yo, en cambio, fuí fanática de la poesía y la obra entera de Benedetti, escribí un post con mi poema preferido. Yo creo que él, como ninguno supo hacer de lo cotidiano algo bello.Saludos a todos por acá. Siempre te leo aunque a veces no deje comentarios.

Anónimo dijo...

Benedetti is dead!